Fuente: https://www.abc.es/cultura/cultural/juana-castro-vida-celebrada-palabra-20230524183503-nt.html
La poeta cordobesa ha dado voz a un mundo profundamente singular y fascinante que vamos a encontrar en esta excelente antología. Juana Castro ha hecho de pequeñez de la vida cotidiana, de sus rutinas, de sus simples tragedias y de sus simples instantes de celebración, un reflejo de grandeza.
Hay un aliento de lo pobre en toda su poesía, un susurro de todas esas mujeres que vivieron en el silencio de lo que quedó al margen. En la raíz de sus poemas está la niña que vivía en un cortijo de Villanueva de Córdoba, la maestra que hizo de la enseñanza un espacio de conciencia, la madre que vivió un drama terrible, la hija que nos habla de cuidar, de convivir con unos padres en el túnel de su enfermedad.
Por eso, en su poesía no hay una sola voz sino toda una galería de voces, toda una escala de modulaciones que van dando cuenta de sus experiencias personales, de sus distintas épocas biográficas, de sus lecturas y sus influencias. La poesía de Juana Castro refleja eso que podíamos llamar la locura de la realidad, es decir, hacer del poema ese lugar donde la realidad se intensifica, donde se muestra como una forma de revelación.
Dos cuestiones hacen de ella una poeta de la revelación: el lenguaje y la mirada. La palabra de Juana Castro nunca deja de ser evocadora, concentrada y misteriosa, siempre sujeta a una sorpresa imaginaria, a una sorpresa contemplativa, a una asociación de palabras o de conceptos verdaderamente reveladora. Una palabra que tiene el temblor de Emily Dickinson y el gusto por la tensión propio de la tradición cordobesa.
A pesar de que su estilo siempre es emocionante, le gusta hablar de la majestuosidad de lo humilde, del esplendor de lo olvidado por la gran historia, de los ritos familiares, de la memoria, de la infancia, de la visión asombrada de la infinitud del universo. Juana Castro ha construido en su poesía no solo el espacio mítico de Los Pedroches sino también su música verbal, la atmósfera, la plástica, la melodía de la naturaleza, y la pobreza, la violencia, la subyugación y, sobre todo, la dignidad de los seres.
Para Juana Castro, el centro del universo es esa fuerza creadora propia de la mujer Sus diálogos entre mito y biografía, entre mito e identidad son una indagación y una reconstrucción de lo que el tiempo orilló, sobre todo el papel de la mujer, la fuerza de lo femenino y la visión del cuerpo como una cosmogonía. Para Juana Castro el centro del universo es esa fuerza creadora propia de la mujer, ese mito que se recrea no solo en la diosa madre sino en el de la mujer que hace del amor y de la pasión íntima, a veces casi susurrada, el motor de su vida, el recuerdo y la intrahistoria de su sentimentalidad.
Todos los rostros Todo ello es lo que nos vamos a encontrar en esta antología que ha cuidadoConcha García y que aparece en la editorial Cántico, un proyecto que busca hacerse un hueco entre nuestras mejores publicaciones de poesía. ‘En el brocal del tiempo’ es una muestra de todos los rostros posibles, de todos los enigmas y perspectivas de esa mujer llamada Juana Castro que ha dado voz a un mundo profundamente singular y fascinante para quien quiera asomarse y ver que nada hay tan conmovedor como una vida celebrada y pensada por la palabra.
DIEGO DONCEL